miércoles, 18 de julio de 2012

Reseña: Bajo la misma estrella



Título: Bajo la misma estrella 
Autor: John Green 
Fecha de Publicación: 2012
Páginas: 300


Sinopsis: A Hazel y a Gus les gustaría tener vidas más corrientes. Algunos dirían que no han nacido con estrella, que su mundo es injusto. Hazel y Gus son solo adolescentes, pero si algo les ha enseñado el cáncer que ambos padecen es que no hay tiempo para lamentaciones, porque, nos guste o no, solo existe el hoy y el ahora. Y por ello, con la intención de hacer realidad el mayor deseo de Hazel - conocer a su escritor favorito -, cruzarán juntos el Atlántico para vivir una aventura contrarreloj, tan catártica como desgarradora. Destino: Amsterdam, el lugar donde reside el enigmático y malhumorado escritor, la única persona que tal vez pueda ayudarles a ordenar las piezas del enorme puzzle del que forman parte...




Mi Opnión: 


Y yo aquí. Hecha un mar de lágrimas. Rebobinando cada detalle una y otra vez. 

Desde que vi el libro quise leerlo, por eso no dudé ni un instante en comprármelo, pero antes debía terminar el otro que estaba leyendo, por eso me apresuré a hacerlo para meterme de lleno en las páginas de este. Antes de leerlo no leí ninguna reseña y ni siquiera la sinopsis, ¿Por qué? Pues, porque su título lo dice todo, y no quería que me contaran lo que ya me esperaba. Bajo la misma estrella es un título que insinúa amor pero también tristeza, por eso sabía lo que me esperaba y no me he equivocado. 

No me enganché desde el principio como se esperaría, aunque sí me enamoré de la escritura de John Green,  pero lo seguí porque sabía que algo bueno, o triste, me estaba esperando. Y sin duda, fue así. Es inevitable no enamorarte de la forma de escribir de este autor por lo que amarán aún más esta historia.

Bien, les cuento un poco de que va. 

Hazel es una chica de 16 años con cáncer de tiroides que se ha extendido hasta sus pulmones, por lo que tiene que estar atada a una sarta de máquinas y a un medicamento que extiende su vida aunque no cura su enfermedad, y nunca anda sin su bomba de oxígeno que la acompaña hasta el fin del mundo. Es una chica que, para su edad, es bastante madura. Ha aceptado que el cáncer acabará con ella tarde o temprano gracias a la metástasis, que ya no hay una esperanza y no hay vuelta atrás. Aún así, intenta vivir con ello lo más normal posible, eso sí, alejándose de todos, incluyendo a sus padres, para no dejar una cicatriz tan grande cuando ya no esté. Es  una chica fuerte, inteligente, cariñosa...

"Soy una granada y en algún momento explotaré,así que me gustaría que hubiera el menor número de víctimas posibles" 

Pero su madre quiere verla tener una vida social y le pide que acuda a un grupo de apoyo donde podrá conocer a nuevas personas... Aunque esto no resulta más alentador ya que todos sufren la misma enfermedad y la lista de muertos en el grupo es bastante larga. Hazel se rehúsa a asistir de nuevo al deprimente grupo pero, para complacer a sus padres, termina haciéndolo. Precisamente ese día conoce a Augustus (Gus)...

Gus es un chico de 17 años al que, a causa de un osteosarcoma (cáncer de hueso), se le ha amputado una pierna por lo que tiene que usar una prótesis y se encuentra a salvo del cáncer. Es un chico encantador,  noble, bromista y muy alegre. Él enfrenta muy bien su enfermedad, de una manera alegre pero realista. Nos hace reír unas cuantas veces gracias a sus bromas y su forma de ver la vida. 

Desde el momento en que Gus ve a Hazel, queda prendado de ella, y lo sé porque, desde que ella llega al grupo de apoyo, él no deja de mirarla. Hasta que ella decide hacerlo también para ver si gana esta batalla de miradas. Desde el momento en el que se encuentran, la química entre ellos es inevitable y desafía todas las leyes, y desde un principio se convierten en un dúo inseparable. 

Estos dos personajes son muy humanos y maduros. Pero debo admitir que Gus se ha convertido en mi favorito, y no porque me enamorara de él porque es el prota masculino ni nada por el estilo. Es sólo que me identifico con él, y no por lo que muchos pensarían, sino porque los dos le tememos a la misma cosa, y no desde el mismo punto de vista de Gus. Él le teme al olvido y yo a algo parecido. Le temo a pasar desapercibida, y no porque me guste la fama ni nada de eso. No necesito ser reconocida. Le temo a morir sin haber hecho algo realmente importante a beneficio de mundo más que al mío propio. Pienso que todos estamos y nacemos con un fin, que estamos destinados a hacer algo, que estamos destinados a cambiar el mundo de diferentes maneras, nacemos para hacer algo grande, pero muchas personas mueren sin siquiera haber aprovechado la oportunidad y realmente no tienen interés en hacer algo diferente. Muchos tienen una misma idea: Nacimiento, evolución y muerte. Le temo a eso, a ser igual que esos que no aprovechan su vida. Gus y yo tenemos eso en común, además de no hacer un fin de mundo de las enfermedades. Él sabe afrontar su enfermedad sin tirarse al abandono porque ella le ganó la partida. Somos iguales en eso, lo sé porque yo también fui enferma toda mi vida, y tuve un problema similar aunque nada parecido ni tan desgarrador como el cáncer.

Además él me recuerda mucho a un querido y adorado amigo, que por casualidad sufría lo mismo que Gus y también se le fue amputada una pierna, y lastimosamente murió. 

En fin, volvamos a la historia...

También me he encariñado con Isaac, otro joven con cáncer, que me ha dado tanta tristeza su situación. Es un personaje secundario y mejor amigo de Gus, pero como desearía un amigo como él. Me ha hecho reír en repetidas situaciones. 

Bien, como iba diciendo...

Hazel y Gus se convierten cada vez más en íntimos y comparten un mismo interés: un libro. Hazel quiere respuestas a incontables dudas que tiene sobre el libro, y ¿quién mejor para responder a todas esa preguntas que el mismo escritor? Por ello, estos dos chicos emprenden un viaje que tiene como destino Amsterdam. Este viaje, sin duda, se convierte en inolvidable y perdurable para ellos, pero no les cuento más porque les arruino la lectura. 

Yo no he parado de llorar desde el principio hasta el final del libro. Y no es que todo sean lágrimas, no. Hay momentos muy alegres y graciosos, gracias a nuestros dos amigos: Gus e Isaac, pero no he podido evitar imaginarme desde un principio cómo sería para cualquier persona pasar por una enfermedad como esa, y más aún, cómo sería el sufrimiento de los padres de estos dos chicos. ¡Dios, cómo me ha hecho llorar Gus! y, calro ¡Cómo me ha hecho llorar mi pobre Hazel!

Esta es una historia entrañable en la que no faltan lágrimas, enojos, alegrías, tristezas, amor... Es un tanto dura, pero es que toma la enfermedad desde un punto de vista realista y nos encontramos con las fases y consecuencias reales de la enfermedad. Nada aquí es rosa y vemos como evolucionan con el cáncer nuestros protagonista. Sus tratamientos crudos y sin censura. Pero vale la pena, las lágrimas y el sufrimiento (porque yo sí sufrí). Es simplemente majestuosa la forma en que John Green nos relata esta historia de guerra contra el cáncer y de amor. Y me he encontrado con tantas frases que son imposibles pasar desapercibidas...
“Algunos infinitos son más grandes que otros infinitos, nos enseñó un escritor. Hay días, mucho de ellos, cuando resiento el tamaño de mi juego ilimitado. Quiero más números de los que puedo tener, y Dios, quiero más números para Augustus Waters que los que ha obtenido.Pero Gus, mi amor,no puedo decir cuando agradecida estoy por nuestro pequeño infinito. No lo cambiaría por el mundo entero. Me diste un por siempre con días enumerados, y estoy agradecida.”

“Estoy enamorado de ti, y no estoy en la situación de negarme el simple placer de decir verdades. Estoy enamorado de ti, y sé que el amor es un grito en el vacío, y sé que el olvido es inevitable, y que estamos todos condenados y que llegará un día en que todo nuestro trabajo se volverá al polvo, y que el sol se tragará la única tierra que alguna vez tendremos, y que estoy enamorado de ti.”  

Aquí no hay peros ni contras. Es simplemente una historia para llorar, amar y sonreír. Podría pasarme horas contándoles que es lo que lo que amo más, pero no he querido arruinar el secreto de la belleza que esconden sus páginas. He querido contarles por encima lo que me ha hecho sentir el libro. No he querido dar muchos detalles para que ustedes mismo tengan la oportunidad de descubrir la historia de estos dos chicos que se encuentran para apoyarse el uno al otro en este crudo camino de la enfermedad. 

Es 100% por ciento recomendable. 

¿Qué más podría decir? Nada más, sino estaría contando todo lo que Hazel y Gus me han contado a mí.



Emotiva, irónica y afilada. Una novela teñida de humor y de tragedia que habla de nuestra capacidad para soñar incluso en las circunstancias más difíciles.   






Calificación: 







5 comentarios:

  1. No me llamaba mucho este libro al principio pero a medida que voy leyendo reseñas tengo cada vez más ganas de leerlo, tiene una pinta estupenda
    besos

    ResponderEliminar
  2. Una reseña genial *.* Todo el mundo dice maravillas de este libro. Me lo quiero leer!!

    Besos desde andrómeda.

    ResponderEliminar
  3. John Green es tremendo autor!!! Muy linda reseña!!!

    Te molestaría checar mi blog?

    http://labellavitadidori.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  4. Lo tengo en mi estantería y va a ser de mis próximas lecturas porque le tengo muchísimas ganas y todas las críticas que he leído son geniales ^-^

    Un besito♥

    ResponderEliminar
  5. Chicasm de verdad que se los recomiendo, no se van a arrepentir, aunque hayan tantas lagrimitas. Besos y gracias por los comentarios ;)

    ResponderEliminar

¡Hola! Es un gran placer para mí tenerte por aquí. Tus comentarios siempre son bienvenidos, siempre y cuando no sean ofensivos en ninguna forma. Te doy las gracias por tomar un pedacito de tu tiempo para comentar.

¡Exprésate aquí!